Un poco de mi trabajo diario en prensa, libros, proyectos personales y demás locuras de mi incansable mente. iidisfrútenlo!!


diciembre 10, 2012

Wallpapers de Navidad!! Bájalos ya!!


Disfruta esta navidad con uno de mis dos Wallpapers oficiales, regalo para todos los que en el año,
siguen mi trabajo y me ayudan a crecer cada día con sus valiosos comentarios.
¡¡Feliz Navidad!!




noviembre 20, 2012

Caricaturas varias...




¿Por qué voto?

Algunas fotos de la inauguración de mi más reciente expo itinerante, ¿Por qué voto? enmarcada en las pasadas presidenciales en Venezuela. Estuvimos recorriendo varias plazas del municipio Chacao en Caracas.







EZEQUIEL.

Hola amigos. Han sido meses de mucho trabajo, estres y proyectos, en el orden que quieran colocar cada uno. He abandonado un poco el blog y lo último que he subido son mis columna de opinión. Hoy les quiero regalar las primeras tres viñetas de mi nuevo personaje: Ezequiel. Espero que les guste.





septiembre 17, 2012

Ridiculez y Populismo


Ridiculez y populismo (Columna Trompo En La Uña diario La Región 17 de septiembre de 2012)

En Venezuela estamos llegando a los niveles de ridiculez como jamás se había visto. Quizás sólo comparable con la Uganda de Idi Amín, aunque salvando las distancias por el tiempo y por las características de represión que, aunque han estado latentes con los círculos bolivarianos y los colectivos de algunas barriadas caraqueñas, no ha llegado a tomar los matices de aquel país. Igual, el segundo presidente y dictador de la mencionada nación africana, es recordado por su excentricidad y sus conocidas muestras de ridiculez, al punto de tener “esclavos” británicos que lo llevaban en una silla, mientras entonaban coros para él. No conforme se adueñó de títulos absurdos como: Presidente vitalicio, Mariscal de campo, señor de todas las bestias de las tierras y de los peces del mar, Conquistador del imperio Británico en África y hasta rey de Escocia. Según Amín, Uganda era una potencia, y él la representación de esa grandeza.

No muy lejos estamos en el país. Ante la falta de argumentos para sostener la tenencia del poder, este gobierno ha pasado apelar por ese sentido de paternalismo y de necesidad ante el jefe todo poderoso, la personificación del país, según han sembrado, convirtiendo de este modo en enemigo de la patria, a cualquiera que le lleve la contraria al jefe máximo de la revolución, el “comandante presidente”, una especie de mesías encarnado.

El “comandante presidente”, nos ha colmado con su personalidad estrambótica, que quiere ser popular, pero termina siendo populista. Personalidad que busca arropar al país, dando paso a todo tipo de campañas basadas en él mismo, como centro gravitacional del proyecto revolucionario.

El 11 de septiembre del presente año, un reporte del diario Ciudad CCS, reseñó algunas palabras del creador del muñeco llamado “chavito”, el comunicador social Vladimir Sosa, quién manifestó la finalidad de su personaje, que no es sorpresa encontrarlo caminando por las calles de caracas. Según Sosa, la idea es poder influir en el sector infantil, que se encuentra bombardeado por personajes y héroes foráneos. La pregunta es, ¿Cuántas veces ha visto usted, o su hijo, alguna comiquita dónde el personaje central sea un mandatario?, ¿Hasta qué punto de idolatría hemos llegado que, un señor, cuyo léxico está compuesto por palabras y frases como: Victorias de mierda, las están llenando de mierda, jala bola, culilluos, plastas, entra tantas otras, puede ser visto como un ejemplo de moral y buenos principios? Y no olvidemos que su golpe de estado (a un gobierno de elección popular) dejó un saldo de 14 muertos y 53 heridos. ¡Tremendo ejemplo!

“Nuestros niños y niñas desconocen a nuestros líderes, héroes y heroínas venezolanos”, dijo Sosa, quién además reconoce que, “Chavito es un proyecto educativo e ideológico”. ¿Dónde está lo educativo en este proyecto? Ideológico si es, porque justamente esa es la meta; seguir sembrando ideologías de falsa izquierda. Iniciativas como los inflables de Chávez, los muñecos de acción chinos del comandante, y hasta los “intumbables” que venden algunos buhoneros, son la muestra más clara del culto a la personalidad, la constante marca del populismo y falta de seriedad de un gobierno sin argumentos verdaderos, con todo a pedir de boca.

No es extraño leer por las redes sociales a ministros venezolanos, repitiendo cual loritos, las ofensas con las que se basa toda la campaña presidencial, desesperada por obtener de los lados de Henrique Capriles alguna respuesta violenta, para justificar sus tesis sobre los oscuros fondos del plan de gobierno, del llamado “majunche”. Lamentablemente, tras no recibir respuesta, sólo queda seguir mintiendo, sólo queda inventar agresiones, cuando son otros los que cargan armas, y hasta los que sus avisos de saboteo a actividades opositoras, se filtra por las redes sociales. Pero a estas agresiones las voltean, con esa facilidad de pintarse de victimas que tiene el gobierno, para luego apuntar a cualquier lado. El tema oficial debería ser “Yo no fui”, de Pedro Infante y luego versionada por Pedrito Fernández. Ante cada reclamo, sencillamente responden: “yo te aseguro que yo no fui, son puros cuentos de por ahí” ¿Cuándo nos equivocamos? ¿Cuándo asumimos?

Lamentablemente la ridiculez se acepta, se vive y se siente como programa de gobierno. El presidente en cada alocución ataca a Capriles, lo ofende, y no conforme, se auto proclama, luego de 14 años de desaciertos, como “lo nuevo”. Se dibuja así mismo “rapeando”, haciendo “caballito” en su motocicleta tipo moto taxista, o toma una guitarra eléctrica para convertirse, según él, en un tipo jovial, preocupado por la juventud de un país, en dónde las oportunidades de tener una vivienda propia, son nulas; a no ser que, se trate de las “cajitas de fósforo” cerca de los depósitos de basura en Las Mayas, que despiden los olores putrefactos de una medida populista.

Pero le seguimos creyendo a las palabras en el aire, como los planes para las 108 hectáreas de La Carlota, a las que el pasado mes de Junio le cambió nuevamente el proyecto para ellas. Hemos pasado de un parque de olas artificiales, a una fábrica de computadoras y hasta un complejo habitacional, llegando a la más cómica de todas las propuestas de supuestos proyectos inmediatos; el circuito de F1, del que la FIA (Federación Internacional de Automovilismo), a estas fechas, aún no tiene noticia alguna. Lo cómico, es que hace unos días, al presi, como que se le olvidó todo esto, porque prometió usar sus espacios para una fábrica de edificios prefabricados, con tecnología portuguesa.

¿Qué falta de seriedad es esta? ¿Qué políticas balurdas son este circo? Lamentablemente hay quienes secundan y aceptan esto con la cabeza en alto, pero con los valores por el suelo. El pueblo elegirá si quiere continuidad de este exabrupto, y de ser así, no quiere decir que sea correcto. Arropados en la legalidad se han cometido atrocidades.

“No debemos olvidar que todo lo que Hitler hizo en Alemania era legal”. Carta de Martín Luther King Jr desde la cárcel de Birminghan, 1963.

Fernando Pinilla

septiembre 10, 2012

Museo del Transporte


Museo del transporte (Columna Trompo En La Uña diario La Región 09 de septiembre de 2012)

Epa, Isidoro, buena broma que me echaste, el día que te marchaste sin acordarte de mi serenata… así inmortalizó Billo Frómeta, a uno de los personajes más emblemáticos de nuestra historia, Isidoro Cabrera González; aquel sencillo auriga o cochero, el último de Caracas que ejerció su profesión hasta el 29 de diciembre de 1963, cuando, como recitara el viejo Billo: “…Epa, Isidoro, por las calles de los cielos…” se marchara para siempre “sin decir adiós”.

Quizás este relato pasaría desapercibido, pues el tiempo borra los recuerdos buenos y cambia la piel de las personas y de las ciudades, en nuestro caso particular, de Caracas; de no ser por la mencionada canción del maestro José María y el trabajo de algunos lugares empeñados tercamente, en no dejar que los recuerdos mueran. Así en una de las salas del mágico museo del Transporte de Caracas José Guillermo Shael, duerme plácidamente el coche silencioso, modelo Victoria Ingles, que recorriera las calles de la perdida Caracas de los techos rojos, llevando a pasajeros anónimos y personalidades como Cipriano castro, Andrés Eloy Blanco y hasta José Gregorio Hernández.

Casi por accidente llegué a este Museo, no porque no supiera de su existencia, sino porque el frenético ritmo de nuestras vidas, muchas veces no nos permite ver por la ventanilla, y nos aleja de estas agradables sorpresas que está ahí escondidas. Ubicado silencioso (aún cuando alberga la potencia de los motores de nuestra historia) cerca de la avenida Francisco de Miranda y el Metro de Dos Caminos, abrió sus puertas en octubre de 1970, y desde entonces se convirtió en albacea de nuestras reminiscencias, vigilante celoso de las crónicas de aquel pasado glorioso de nuestro país, y es que, ya sea a pie, en mula o caballo, tren, autos y aviones; Venezuela era sinónimo de progreso.

Tras cruzar la entrada, en la que se pide una colaboración voluntaria, se mezcla la magia con la realidad, el pasado con el presente, el progreso con la decadencia de una fundación que lleva más de un año bajo la constante amenaza del Ministerio del Ambiente, quién desde enero de 2011 ha solicitado el cese del comodato que vence en 2018, pidiendo que se decrete una medida de secuestro sobre el terreno en donde ha funcionado desde hace 40 años el museo. El motivo: una ampliación del Parque del Este, aunque comentarios han hablado de algún complejo habitacional en la zona.
Aún con la precaria situación, ya que su principal inquilino cesó el pago de las mensualidades por orden del Ministerio del Ambiente, el museo sobrevive gracias a la voluntad de sus empleados y de todos aquellos que, tras cruzar sus puertas entienden su importancia y lamentan y repudian la triste realidad que vive. La muestra permanente es cuidada por manos voluntarias, pero aún así, como manifiestan varios empleados, muchos de sus vehículos viven la marca inequívoca del paso del tiempo, ante la mirada indiferente de las autoridades que no aportan para la conservación del patrimonio. Aún así, los jóvenes guías muestran compromiso en medio de las necesidades y apoyan a los visitantes.

Los domingos la sorpresa es doble. No conformes con deleitarnos con su colección de 104 carros, 12 locomotoras, aviones, carruajes, carretas y embarcaciones; en una jugada de creatividad y ganas de seguir educando a la ciudad, se usan los espacios de este hermoso museo para la realización de una feria de antigüedades, compuesta por puestos abarrotados de miles de objetos de colección, y algunos otros que ofrecen comida, con la finalidad de tenderle una mano al museo (Los expositores de la feria pagan un porcentaje por los puestos), y así de esta relación de perfecta simbiosis, ofrecer una alternativa para los caraqueños, un lugar de culto; como esos que añoramos de otros países, y que muchos no sabemos que tenemos acá mismo.

Es imposible entrar y salir con las manos vacías desde las 9:00 am hasta las 4:00pm un domingo, pero aún más difícil, es no dejar de admirar la muestra y las instalaciones del museo, que pide a gritos la mano de aquellos que entienden que la historia, no es sólo para usarla con fines políticos, sino para cuidarla, preservarla y encargarnos de que las generaciones futuras, puedan disfrutar de ella.

Pero la historia sólo es hurgada, pareciera, como un dato para alimentar la razón de algunos, y justificar la ambición de otros. Venezuela destaca a grandes trazos, por la poca visión de cuidar nuestro legado histórico sin fanatismos. El siglo XX vio desaparecer la mejor cara que tenía Caracas y las principales ciudades del país. El nuevo siglo no se ha escapado de eso, y se usa la historia para proselitismo con intereses mezquinos. No miramos el pasado de manera objetiva, y sólo lo vemos como parte de un plan de gobierno, cuando nuestra historia es más que pintar una fachada con dibujos alegóricos, que muestran una visión pobre de nosotros mismos.

La historia se usa para crear identidad y orgullo nacional, sentido de pertenecía y una visón critica y pluralista del pasado, para juzgar el presente y construir el futuro. La historia como la que alberga el Museo del Transporte, está para cultivarla, transmitirla y darle mayores dimensiones, no para amenazarla y acabar con la crónica nacional que alberga este espacio.

Pasear por los hermosos jardines de este oasis en medio del caos citadino, es una experiencia que todo caraqueño y venezolano debería experimentar, al menos, una vez en su vida. Admirar nuestra evolución, nuestra historia, desde un antiguo camión de helados criollos, aviones militares y hasta los coches como los de él nostálgico Isidoro, son un legado que se debe visitar, así como su esplendida biblioteca (sitios en extinción en el país) que está dispuesta para nuestra formación, para saciar nuestra curiosidad, y el deseo de encontrarnos con nosotros mismos en la perspectiva que hoy más que nunca necesitamos.

Si mis sugerencias sirven: no dejen de visitarlo.

Fernando Pinilla

agosto 23, 2012

¿Potencia deportiva?



¿Potencia deportiva? Columna Trompo En La Uña, diario La Región 19 de agosto)

¿Para qué caernos a coba? La participación de Venezuela en las olimpiadas de Londres no puede calificarse como “exitosa”, aunque nos duela en el corazón. Hablamos de una presea dorada lograda por el esgrimista Rubén Limardo en un acto, prácticamente, aislado. Galardón que, conjuntamente con el del “Morochito” Rodríguez (obtenido hace 44 años) nos deja con un saldo de dos medallas de oro; trece preseas en total, desde la primera participación de Venezuela en las olimpiadas de 1948. Un dato interesante: sólo en Los Ángeles 84, hemos logrado superar la maldición de una medalla; en esa ocasión, obteniendo tres de bronce.

Hay problemas en el deporte, aunque -para variar- desde el gobierno se intente negar. Con la tendencia a prohibir las críticas se busca, infructuosamente, hacer ver todo desde una perspectiva desbalanceada, pintando una realidad que no existe; pero lo cierto es que estamos en “0” en avance deportivo, aun cuando el ministro de deportes Héctor Rodríguez hable de “logros” (que no especifica) en los últimos 13 años, gracias según éste, a las políticas del presidente. Hace 44 años ganamos una presea dorado, hoy tenemos otra; total: dos (2). No hay más cuentas.
El país carece de infraestructura y de planes a mediano y largo plazo, por lo que muchas disciplinas no se pueden practicar en el país. Ese es el caso de Rubén Limardo, quien ha desarrollado su carrera en Polonia, viviendo las duras y las maduras -según palabras de él- por además, carecer de apoyo gubernamental; tanto así, que ha llegado a declarar sus malas relaciones con el COV. Aunque ambiguas muchas veces sus declaraciones, es claro que existe un descontento igualmente en muchos deportistas. Tal es el caso de Daniela Larreal, quien inicialmente suavizó sus palabras por Twitter, manifestando que el presidente era “engañado” y a los deportistas no se le asignaban los recursos a tiempo. Luego de quedar eliminada en Londres, Daniela no ocultó su enojo con un aparato gubernamental que largamente da muestras de no funcionar: “Nunca los ves, pero cuando ganas medallas están ahí”, sentenció.
La verdad en el deporte, como todo en el gobierno, se vuelve turbia y rápidamente entra en una zona en la que la realidad, para ellos, es un informe oficial. El gobierno y sus partidarios, en su afán de convencerse a sí mismos que vivimos en una potencia (una mezcla de Canadá, Estados Unidos y Alemania) se ufanan de la medalla de Limardo. Me pregunto: ¿Dónde están las escuelas de esgrima bolivarianas?, ¿dónde está la academia bolivariana de automovilismo de la que saltó Pastor Maldonado a las pistas europeas? ¿Algún beisbolista llegó a las grandes ligas gracias al gobierno?

La cruda realidad es que Venezuela quedó empatada en cantidad de medallas con las humildes Bahamas y Granada, pero por debajo de ambas en el puesto 13. No le hizo mella a ninguno de sus rivales por tradición: Brasil y Colombia; salvando el honor gracias a un hecho deportivo aislado, no como consecuencia de políticas de apoyo y continuidad en el deporte. Lamentablemente hay personas que no quieren ver y sus representantes en el gobierno, prefieren seguir mintiendo.

¿Por qué no nos fijamos en nuestros vecinos y comparamos? Por ejemplo, para el deporte colombiano fue una participación histórica el sumar ocho medallas (1 oro, 3 platas y 4 bronces); sin embargo, las voces críticas de los deportista - incluyendo academias y semilleros de las disciplinas en cada región- exigen al gobierno mejoras inmediatas y mayor apoyo. Hablamos de un país donde Coldeportes y el COC han centrado esfuerzos en detectar las regiones en el país en donde los niños nacen con condiciones excepcionales para el deporte, además de ofrecer justas nacionales de nivel. Todo con el apoyo de un Estado que ofrece, además infraestructura, entrenadores extranjeros (si amerita la disciplina); además de pagar salarios acordes para entrenar sin preocupaciones. Todo lo anterior, aunado a 15 años de trabajo continuo y fundamentado es políticas certeras, evidencian el crecimiento que ha experimentado nuestro rival directo, estándar por antonomasia, y que termina por desnudar la realidad del deporte venezolano.

La mejor forma de corregir, es aceptando los errores. Lamentablemente, el gobierno se empeña en negar las realidades y su prensa oficialista sólo cumple su función de enviar al pueblo boletines informativos, en los que las cosas malas del país no son nombradas. Las necesidades, en la idea absurda de tapar el sol con un dedo, las omitimos aunque estén en la calle y resaltan sin necesidad de ver Globovisión o leer El Nacional. Los resultados en las olimpiadas no tienen otra traducción.
La crisis se agrava en este régimen cuando algunos deportistas en su miedo a perder las migajas justifican y terminan emulando a sus colegas de Corea del Norte y Cuba, agradeciendo de cuanto logro obtengan a sus líderes políticos; suerte de coach, inspiración celestial y al final únicos responsables por encima de su talento y esfuerzo, de lo obtenido en sus disciplinas.

Al final el tema cae en la telaraña de “la cuarta”, “la oligarquía” y la maña de pintarse como víctimas. Hemos perdido la capacidad de ser críticos ante las realidades y aceptar cuanta versión oficial circula. Hemos creído en las publicidades en las que La Vinotinto es el resultado de políticas de PDVSA, desconociendo el único proceso coherente y consecuente, que en materia de deporte se viene trabajando desde antes de1998, cuando Chávez no podía emitir opinión alguna.
La mesa está servida y cada quién puede sacar conclusiones. No somos potencia deportiva, aunque tenemos todo para serlo. Si no se cambian las estrategias serán estériles los intentos por figurar en las olimpiadas, por más talento que sobre en el país.

No es cuestión de derecha o izquierda, porque si a eso vamos, entonces la izquierda revolucionaria fue claramente vencida por el capitalismo americano. Se trata de bajar los decibeles del fanatismo y apuntar a los defectos, errores y vicios del gobierno y el COV. Ser objetivos y realistas no es pecado.

Fernando Pinilla

julio 17, 2012

El Cambural: Entre la belleza y el olvido.

El Cambural: Entre la belleza y el olvido.(Columna "Trompo en la uña" diario La Región, 15 de julio 2012)



Llegar a El Cambural en San Antonio de los Altos no es complicado. Se tiene que tomar la vía que va a Potrerito y La Mariposa, ahí, cuando estas llegando a Pacheco (un pequeño caserío del municipio) doblas a la izquierda y continúas por una vía justo al lado de un tanque de agua de acero en la entrada. Comienzas a bajar por una excelente carretera pavimentada que se interna en la montaña (con una hermosa e imponente vista a Caracas), hasta ahí sin novedades, más allá del asombro del paisaje.

Luego de serpentear por algunos minutos entre una exuberante vegetación que se hace más densa a medida que nos encontramos cerca de la quebrada que bordea el camino; empezamos a apreciar la verdadera realidad de este paraje típico de Altos Mirandinos. Un talud de tierra corta el paso abruptamente en la carretera y la convierte en una trocha. Lo que viene después es un contraste abrupto entre la magnífica naturaleza, el olvido de las autoridades y la mano destructiva del hombre.

Una esplendida carretera pavimentada se pierde entre fallas de borde, basura acumulada a lo largo del trayecto y el olvido de los vecinos y de cualquier autoridad con la competencia de cambiar esta postal. La mal denominada “maleza” borra paulatinamente el registro de la presencia del hombre comiendo la carretera, lamentablemente hay huellas que no se pueden borrar. Aún con la mano dañina del hombre, la quebrada viaja entre rocas moldeadas por cientos de años en un paraje de belleza indescriptible. La flora y la fauna que se consigue son del tamaño de la grandeza que le imprime la naturaleza a esta hermosa zona. Aves del Paraíso, Bromelias y otras exóticas flores crecen salvajemente en la espesura de los matorrales. Pero esto no es suficiente para el hombre que termina convirtiendo todo lo bueno en algo malo.

La realidad es que mientras la naturaleza crea belleza, el hombre se empeña en crear caos. El Cambural es testigo del hampa descontrolada en el país, y su paisaje muestra vehículos desvalijados por los amigos de lo ajeno. En el caudal del río consigues también: cables, cauchos, así como botellas de bebidas alcohólicas, que terminan alterando el ecosistema. Pero no sólo El Cambural es víctima de la basura resultado de mentes minúsculas, sino que; en varias ocasiones han intentado invadir y deforestar un bosque, que hasta hace algún tiempo, era zona de protección de La Mariposa. Pero, si el propio embalse es un desastre, ¿qué podemos esperar de las zonas aledañas?

A veces Dios le da pan al que no tiene dientes. Quizás sea la frase que mejor se puede aplicar a la realidad con la que debe sobrevivir esta zona. Mientras países del mundo anhelan parajes como el que tenemos, acá nos damos el lujo de desperdiciarlos. Los Salias es un municipio que teniendo el potencial para explotar sus bellezas naturales, se conforma aún hoy, con ser una ciudad dormitorio. Lo que otros países lo convierten en centros de ecoturismo, nosotros lo convertimos en depósito de basura, rincón para bebidas y un excelente sitio para erigir una barriada de invasión. Preguntas surgen mientras escribo, porque la mano del hombre sigue destruyendo lo que tanto trabajo llevó para gozar del equilibrio y la belleza que destella.

¿Hasta cuándo las autoridades municipales, estatales, nacionales, seguirán dando la espalda a los recursos naturales? ¿Hasta cuándo las políticas del olvido? Sé que mis palabras levantaran roncha; pero la realidad es que cualquier iniciativa que se haya tomado es poco. El Cambural tiene (como todo el municipio Los Salias) lo que se necesita para brillar y para mostrar la belleza natural que ha hecho de Altos Mirandinos, una zona de envidia por su clima y sus parajes naturales.

Mi llamado es para todos los vecinos y las autoridades competentes para recuperar una zona que nos regala el milagro de la mano de Dios. Un milagro que no cuesta nada y del que podemos sacar provecho a todo nivel. Hablamos de un pequeño refugio natural de cientos de especies (animales y vegetales) dignas de estudio y observación por parte, no sólo de especialistas, sino de la ciudadanía en general, estudiantes y porqué no, hasta turistas de otros estados.

En las manos de todos los sanantoñeros y principalmente de las autoridades, está la suerte de cambiar nuestras realidades. Basta de politiquería. Necesitamos urgentemente de acciones concretas en conjunto para recuperar lo que se sigue deteriorando, mientras leemos esta columna, y hacer así de El Cambural y todo San Antonio, el municipio modelo, que sí podemos ser.

Fernando Pinilla

mayo 09, 2012

Paso a Paso Claudio Nazoa...

Acá les dejo el paso a paso de la próxima ilustración de la columna del gran Claudio Nazoa en la revista Clímax.

Caricaturas y humor...

Algunas caricaturas personales, un cachito de prueba y un poco de humor para las revistas. Espero que les guste.

abril 16, 2012

La Bora “deBora”



La Bora “deBora”(Columna "Trompo en la uña" diario La Región, 15 de Abril 2012)

Hay veces me canso de opinar. Pareciera que las cosas que se pueden percibir en la calle no son como uno cree. Como dice mi pana Daniel Palacios, periodista de Tal Cual: “es una de las grandes cualidades maquiavélicas del gobierno, mostrar como bueno lo malo, darle un giro a todo y buscarle una cara favorable a ellos”
Mucho se ha hablado del caso de la presencia de la Bora en el embalse de La Mariposa. Esa especie de alfombra que cubre toda la superficie de este (como llama el ministro de Ambiente, Alejandro Hitcher) “tanque” que almacena 8 millones de metros cúbicos de agua. Se trata de la Eichhornia Crassipes, Jacinto de agua común, o Camalote; originaria del Amazonas y, considerada por los especialistas una planta invasora de la cual no desconocen sus propiedades benéficas en espacios controlados. Sin embargo este no es el caso de La Mariposa.

Puedo pecar de ignorante ya que no soy biólogo, y no puedo hacer una crónica de la presencia de esta planta en el embalse; sin embargo he vivido en este pueblito hermoso de Altos Mirandinos (San Antonio de los Altos) desde el año 87, y realmente solo puedo recordar la presencia de esta planta, como una plaga, desde finales de la década de los 90´s. La realidad es que esta “plantica” que parece inofensiva a primera vista, según descubrí leyendo algunos materiales, tiene una cara maléfica cuando está fuera de control en espacios de difícil acceso. Bajo ciertas circunstancias la Bora se transforma en una especie eutrófica (crece descontroladamente por exceso de nutrientes), creando una barrera en la superficie que imposibilita el paso de la luz del sol al agua, y de esta forma impide diversos procesos ecológicos como la fotosíntesis, afectando la producción de oxígeno y la fijación de carbono; en pocas palabras deteriorando la calidad del agua. Y como guinda del postre, si su crecimiento es descontrolado en espacios amplios y no controlados como estanques, toca removerla mecánicamente (método sumamente costoso) procurando no romperla, porque se dispara su reproducción, creo, el caso de su presencia en el embalse.

De verdad me llama la atención escuchar de boca del ministro del ambiente, afirmar que el estado actual del embalse, que tiene años con la presencia de esta planta que ha ido copando la superficie de toda el agua, es producto de una “siembra controlada”. Insisto, puedo equivocarme, pero no he escuchado nada de “Misión ensalada” en La Mariposa. Y me aterra más que el ministro lo tome a la ligera, y hable casi de una “cosecha” (como si fuera lechuga) programada en dos meses, palabras dichas en un entrevista el 22 de Marzo. Creo el ministro no sabe lo anterior y menos que investigadores de la FAO, Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (por sus siglas en inglés FAO) clasifican a la Bora como una maleza acuática; además de estar incluida entre las 100 especies exóticas invasoras más dañinas del mundo, en una lista elaborada por el Grupo Especialista de Especies Invasoras (GEEI), de la Comisión de Supervivencia de Especies (CSE), de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.

Es más, haciendo un poco de historia, el ministro pareciera desconocer que la Eichhornia Crassipes, ha sido introducida por el hombre en países del trópico y subtrópico donde se ha propagado hasta convertirse en una maleza acuática extremadamente grave, desarrollando infestaciones extensas en el sur de los EE.UU. (especialmente en Lousiana y la Florida), en México, Panamá y muchas regiones de Africa (especialmente los sistemas de los ríos Nilo y Congo); el sudeste Asiático, Indonesia y Australia.

Es tan grave la presencia de esta “plantica”, que en la cuenca del Guadiana (Badajoz, España), es una de las plagas más problemáticas, luego de casi copar 75 km de río, produciendo entre otros dañitos, aparte de los daños materiales y a la economía agrícola y pesquera, pérdida de agua por evapotranspiración, eutrofización del agua (palabra que se me grabó en bachillerato por la podredumbre que produce en el agua), falta de luz en el fondo y aumento de la sedimentación.

La solución no es tan fácil como la pinta el ministro. De 2005 a 2006 en España, retiraron 134.823 toneladas de Bora, con un costo de nada más y nada menos que 6 millones de Euros, y lo peor, es quizás, que cuando produce semilla esta inofensiva plantica, la proliferación es latente en un periodo de 15 a 20 años, lo que ha motivado que el Grupo Especialista en Invasiones Biológicas (GEIB), también la agregara a otra lista negra, al incluirla en el top 20 de especies invasoras exóticas más dañinas presentes en España, y manteniéndose alerta ante su aparición.

No puedo creer que el ministro no sepa lo anterior. Esa información prolifera en internet como la Bora en La Mariposa, dónde no dejan de ser reconocidas sus funciones positivas en estanques, pero de advertir sus graves consecuencias, que ya vivimos en Altos Mirandinos.

Pero esa maña de negar los problemas nos va a terminar de hundir. La Eichhornia Crassipes es una realidad que se une al descuido del embalse, que es víctima de todas las plagas del “apocalipsis criollo”, que destruye todo lo que solo necesitaba ser mejorado. Aunque les moleste, muchos podemos recordar en la IV, cuando el talud de tierra con la cominería que coronaban los Kayac y sirve de dique, lucía de forma cuidada, aún con los problemas que ya enfrentaba el embalse, siendo espacio para los deportes acuáticos; cosa que la Bora, también “deBoró”. Hoy el aspecto de La Mariposa es terrorífico. Hoy aunque el fanatismo nos impida ver y nos deje sin sentido del gusto, decir que en La Mariposa todo está bien es negar la realidad. Lo peor es que hablamos de un problema que en todo el mundo es considerado de dimensiones dantescas y de sumo cuidado. Acá, como siempre, no pasa nada.

Fernando Pinilla